miércoles, 30 de mayo de 2012

La estrategia en el poker


La estrategia que uses y tu habilidad serán determinantes para ganar o perder al poker. Y para dominar cada tipo de juego se necesita mucha constancia y horas de aprendizaje.
Lograr una estrategia sólida debe ser uno de tus principales objetivos y para hacerlo debes combinar varios factores: ser cauteloso, jugar son agresividad, ser imprevisible y aprovechar los errores de tus adversarios.
Yo te voy a ayudar a mejorar con mi sección de estrategia, en la que encontrarás artículos que te permitirán ganar y convertirte en un buen jugador de poker. También aprenderás las armas para desestabilizar a tus rivales, reconocer su estilo y los trucos para lograr el éxito en el juego.

Robar las ciegas


Las apuestas obligatorias en el poker corresponden a la Ciega Pequeña y a la Ciega Grande. El aporte de ambas contribuye a crear el bote de una mano, aunque sin conocer si tienen buenas cartas.
Una de las estrategias que debes aprender para mantener o incrementar tu stack es el robo de las ciegas. Además te servirá para obtener ganancias con miras a financiar otras manos de poker.

¿Cuándo robar las ciegas?

Para robar las ciegas es necesario que se cumplan dos condiciones: la primera relacionada con la posición en la mesa de poker y la segunda, con la acción de los otros jugadores.
Si estás de Cutoff o Dealer tienes el mejor lugar para hacerlo, porque debes estar ubicado antes que las ciegas. Se trata de subir las apuestas en esta posición si ningún otro jugador lo ha hecho antes que tú o si ha apostado menos.
La idea es obligar a tus rivales a retirarse antes del flop haciendo subidas y resubidas, por lo menos dos veces por encima de lo mínimo.

Estrategia para robar las ciegas

Tu estrategia debe estar dirigida a conocer y atacar a los jugadores en las ciegas. En una mesa puedes encontrar jugadores pasivos (tight) que prefieren hacer fold y no arriesgarse; los agresivos que defienden las ciegas en exceso, incluso haciendo all-in para intimidar a otros jugadores y los que no prestan atención al juego porque están jugando en muchas mesas a la vez.
Tendrás muchas oportunidades de robar si los tight están en las ciegas. Igual si son jugadores que no prestan atención a lo que pasa en la mesa.
Pero si son agresivos, tendrás que ser cauteloso porque podrán jugar fuerte en el flop para obligar a retirarte, aun cuando tengan manos débiles. Si tienes cartas altas puedes aprovechar esta situación para robar las ciegas y doblar tu stack.
Una puesta agresiva también te garantiza el éxito en el robo de las ciegas. Puede ir all-in si tienes pocas fichas y quedan pocos jugadores en la mesa.

¿Cuándo no debes robar las ciegas?

En ciertas situaciones puedes fracasar al intentar robar las ciegas, sin contar que no siempre vale la pena robarlas. En ese sentido, debes aprender a identificar cuándo debes evitarlo.
Si ves que las ciegas no aumentan considerablemente tu stack, no debes arriesgarte. Sé selectivo. Hazlo sólo cuando creas que robarlas ampliará significativamente la cantidad de tus fichas.
Tampoco es recomendable hacerlo si no has ligado nada en el flop y otro jugador ha subido, porque corres el riesgo de perder las apuestas.

Check and Raise


El Check and Raise es otra de las estrategias que debes dominar si quieres desestabilizar a tu rival, eliminarlo y ganar el juego. Conocerla también te permitirá defenderte en caso de que otros jugadores la usen en tu contra.
Si quieres minimizar tus pérdidas y ganar ventaja debes usar esta técnica, que consiste en tender una emboscada a tus adversarios. No sólo está dirigida a eliminarlos, sino a llevarlos a cometer un error creando dudas sobre la fuerza de tu mano.

¿Cómo hacer Check and Raise?

Hacer Check and Raise es muy sencillo. Se trata de pasar (check) en la primera ronda para obligar a tu rival a apostar, con la intención de subir la apuesta (raise) en la otra ronda. Este aumento debe ser lo suficientemente alto para causar el efecto que esperas.
Esta es la emboscada, porque después de la subida el siguiente jugador estará inseguro y creerá que tienes una gran jugada, logrando así una ventaja psicológica sobre tu oponente. En caso de que él tenga una mano débil o media, pasará de tu apuesta. Si resube, debes pensar que él tiene una mano fuerte.
Para la siguiente ronda, debes insistir en tu estrategia si tienes cartas más o menos fuertes pero con cautela, porque te puede estar tendiendo una trampa. Puedes pasar para ver su reacción y si vuelve a subir, es el momento de retirarte pues seguramente tendrá una mano mejor que la tuya.

¿Cuándo usar Check and Raise?

Esta estrategia no debes usarla siempre sino en situaciones muy específicas, porque puede perjudicar tu juego:
  • ·         En caso de que tu adversario no apueste, le estarás regalando una carta que podría servir para lograr una combinación mejor que la tuya.
  • ·         Estarás dando información sobre la fuerza de tus cartas, especialmente si aplicas esta técnica en el turn.

Por eso, intenta aplicarla en los siguientes casos:
  • ·         Si crees que tienes una mano muy fuerte. Así evitarás sorpresas desagradables.
  • ·         Cuando hay 4 o más jugadores en la mesa, ya que la idea es subir las apuestas y al ser menos, alguno intentará llevarse el bote apostando más fuerte.
  • ·         Si estás en una de las primeras posiciones en hablar, pues de esta forma esperas a subir la apuesta de un jugador en la posición tardía y eliminar a tus rivales.
  • ·         En un cara a cara, úsalo siempre cuando sospeches que tu adversario tiene una mano débil.

Jugar con AK


Una de las 10 mejores manos que un jugador de poker puede tener es AK (As y Rey). Pero aprovechar la ventaja que aporta esta fuerte mano depende de tu habilidad y de la situación que se presente. De igual forma, es importante que entiendas los riesgos de usarla en el momento menos indicado.
No te confíes por llevar AK (Big Slick). Conoce cómo y cuándo usarla, así como los trucos para garantizar tu éxito con una mano de este potencial.

¿Cómo jugar con AK?

La Big Slick puede tocarte más frecuentemente de lo que imaginas, por lo que si sabes usarla podrás ganar fácilmente o retirarte sin pérdidas en el momento oportuno.
La eficacia de esta combinación está en jugarla con un número reducido de rivales; si es uno o dos, mejor. Para lograrlo debes subir y resubir tus apuestas, así desanimarás las manos más débiles. De no hacerlo, corres el riesgo de perder la ventaja que te da esta mano y el bote por un bad beat.
Es decir, debes ser agresivo desde el principio (pre-flop) mediante apuestas fuertes. Con ello, obligarás a tus oponentes a retirarse antes del flop. Y al llegar al flop debes continuar con esta misma estrategia así no hayas ligado nada, porque seguramente tus rivales tampoco hayan ligado y tirarán sus cartas frente a tu apuesta.

Los riesgos de jugar con AK

Si bien es cierto que tendrás una mano muy fuerte, no debes dejarte llevar al pensar que tienes la mejor mano de la mesa. Debes ser cauteloso antes de usarla en determinadas situaciones, especialmente en el flop.
Si aparecen en el flop AQJ, KQJ o AJT, tu adversario puede fácilmente combinar escalera, trío o doble pareja. Ante esto, apuesta con precaución y está atento si no se retira. De no tirar las cartas, tu oponente puede poner en riesgo tu mano porque cualquier par le gana a AK.
También enfrentarás una situación complicada cuando en el flop tengas algún proyecto de escalera o color. Debes subir tus apuestas sustancialmente para desalentar a tu oponente a completar la combinación.

La posición con AK

Otro factor que debes tener en cuenta al jugar con AK es la posición. En las primeras posiciones tendrás que poner en práctica una estrategia distinta frente a una tardía.
Jugando entre las primeras posiciones, como UGT, por ejemplo, puedes comenzar subiendo tu apuesta y espantando a los jugadores que tienen malas cartas. También puedes hacer call y resubir o check and raises después, así das a entender que tu mano es realmente fuerte.
Sin embargo, las últimas posiciones, como Cutoff o Dealer, te darán información sobre tus oponentes y las manos que llevan. Una subida de las apuestas te indica que tus rivales tienen cartas fuertes, por lo que la cautela será tu mejor amiga desde alguna de estas posiciones.

El perfil del jugador



Una de las primeras acciones que debes emprender en el poker es analizar y entender los tipos de jugadores que podrás encontrarte, además de las reglas y las estrategias. Esto te ayudará a conocer su estilo de juego, las cartas que juega, cuánto apuesta y desde dónde lo hace.
Igualmente, te servirá para definir el tipo de jugador que quieres ser tú, en función de las características de cada uno y tus objetivos.

El jugador pasivo o Tight

“Vivir feliz es vivir oculto”, ese es su lema. Este jugador casi nunca apuesta a menos que considere que sus cartas tienen cierto valor y se retirará cuando su mano no tenga posibilidades. La mejor forma de vencerlo es apostar contra ellos, porque son predecibles en su juego y la mayoría de las veces foldean.

El jugador sólido

Se trata de un jugador muy discreto y con una fuerte intuición para detectar las situaciones que mejor le convienen. Al igual que un jugador Tight, suele jugar pocas veces, pero muy consciente del valor de las cartas.
Debes ver con cautela este tipo de jugador, aunque una vez que has descubierto su tipo de juego es fácil atacarlo y vencerlo, porque es racional y predecible.

El jugador Calling Station

Este tipo de jugador tiende a salir en casi todas las manos, caracterizándose por hacer mucho call y poco raise. Tiene poca iniciativa y suele dejarse llevar a su suerte, por lo que es el peor jugador.
Siempre que tengas cartas buenas debes apostar, porque estos jugadores igualarán con manos débiles.

El jugador Loose

Es impulsivo y termina jugando en muchas manos pese a tener malas cartas, pero no llega a ser tan extremo como el Calling Station. Suele ser pasivo o hacer call con frecuencia, pero su verdadero problema es que no presta atención a su posición ni al valor de las cartas, por lo que pierde constantemente.
Tu estrategia para frenar el juego de un Loose debe estar centrada en apostar fuerte cuando tengas posibilidades y sin faroles.

El jugador maníaco

Es un Loose pero más agresivo. Se puede convertir en una auténtica pesadilla en un juego de poker porque va a todo: no le teme a nada y arriesga demasiado.
Lo identificas fácilmente porque apuesta fuerte todo el tiempo aunque no lleve nada. No te confíes mucho y ármate de paciencia con este tipo de jugador, haciendo call si tienes manos buenas.

Consejos para principiantes

En el poker puedes tener múltiples perfiles porque siempre te enfrentarás con situaciones nuevas. La experiencia te dirá cuál adoptar en cada momento, pero intenta siempre sacar provecho de la mejor cualidad de cada perfil.
¿Tight, sólido, calling station, loose o maníaco? Tú decides cuál quieres ser y qué perfil te ayudará a ganar en cada mano.

Como gestionar el dinero


La buena gestión del Bankroll es el concepto que más claro debe tener un jugador de poker. Antes de conocer los límites, estrategias o faroles, debes tener muy claro de qué estamos hablando cuando mencionamos la buena gestión de la banca o bankroll.

¿Qué es el Bankroll o banca?

El Bankroll es el dinero del que dispone un jugador para destinarlo a jugar al poker. La buena gestión del bankroll consiste en asegurarse de tener una cantidad de dinero suficiente para poder seguir jugando al poker a largo plazo. Para ello es importante mantenerlo en un cierto nivel, protegerlo y por supuesto aumentarlo.
En la gestión del bankroll debes tener en cuenta tanto los límites, las reglas, las estrategias y las variantes del poker, como también aspectos psicológicos y condiciones físicas y mentales de cada jugador.

Equilibrio entre juego y vida

Para gestionar bien el bankroll, el consejo es separarlo de aquel dinero necesario para “pasar el mes”o pagar los gastos de tu vida diaria.
Un error común es poner los dos en la misma bolsa, de este modo se llega inevitablemente a la quiebra tarde o temprano, ya que un problema de gestión en uno influye en el otro.

Las partidas y los límites

Todo principiante debe empezar por un límite bajo. Te recomendamos que el límite no supere el 2% del dinero total que destinas para jugar. Por ejemplo, si tienes un bankroll de 50$, juega torneos de 1$. Para aumentar los límites, debes dominar por completo las reglas del poker y empezar a sentir confianza y seguridad en tu juego. Empezar eligiendo mesas en las que las apuestas sean bajas, te permitirá también familiarizarte más fácilmente con el ambiente y las sensaciones que se tienen en una partida de poker.
Lo recomendable es empezar a jugar Fixed Limit Holdem, donde se limita la cantidad permitida a apostar en cada ronda.
Por ejemplo si el límite es $0,5/1, quiere decir que en las dos primeras rondas (Pre-Flop y Flop) las apuestas y subidas no podrán ser superiores a 0,5$ y en las dos rondas siguientes (Turn y River) las apuestas serán de 1$.

Aspectos psicológicos

Para gestionar el bankroll, primero debes saber autogestionarte bien. El poker es un juego que requiere concentración y autocontrol y por eso ciertas condiciones físicas y mentales pueden influir en la gestión.